Existen algunas estrategias que podrían ayudar a las empresas a frenar este tipo de fraudes. Por ejemplo:
- Realizar periódicamente controles del personal laboral. Esta política no solo incluye a los trabajadores que ingresan nuevos, sino también a los que ya están dentro de la empresa. No se puede saber si alguien ha incumplido la ley recientemente o ha realizado acciones fraudulentas en el pasado o actualmente.
- Se deben Instalar video de circuito cerrado en las instalaciones comunes y anunciarlo a los trabajadores.
- Se deben restringir el acceso a los archivos y áreas clasificadas. Solo el personal que esté debidamente capacitado y autorizado pueda acceder a la información confidencial de la empresa.
- Supervisión directa del personal. Hay que mantener un constante seguimiento del personal que tiene acceso a datos privados de la empresa para así comprobar que no se esté filtrando alguna información a la competencia o esté saliendo información de forma descontrolada.
- Mejorar la comunicación y el clima laboral. No es una utopía, pero mientras el personal esté a gusto y se sienta feliz en su lugar de trabajo, habrá menos posibilidades de que realice acciones fraudulentas, ya que existirá un lazo de pertenencia a la empresa y compañerismo hacia el resto de los empleados.
- Mantener informado a los trabajadores de las posibles consecuencias jurídicas que podrían enfrentarse los trabajadores que comentan fraudes dentro de la empresa.
- Se deben preparar estrategias que amparen a la empresa en cualquier hecho fraudulento.
Es deseable siempre contar con una ayuda externa de profesionales si no se tiene mucha experiencia en el campo de la investigación y protección de confidencialidad. En MONOPOL Detectives Privados en Madrid brindamos toda la información y servicios prácticos que se pueden ofrecer a las empresas para mejorar los sistemas de detección del fraude, resguardando en todo momento la confidencialidad y la privacidad